Ante las declaraciones de la diputada nacional Elisa Carrió, los legisladores provincial que reportan a Ricardo Alfonsín hicieron asambleas y emitieron un comunicado donde se intenta sintetizar la postura del colectivo que “lamenta” la pérdida del FAUnen y a la vez repudian la imputación directa que se le hace a los diputados radicales de que “le cobran a Scioli para aprobarle las leyes”.

“Queremos expresar que lamentamos su alejamiento del Frente Amplio UNEN, pero a la vez rechazamos y repudiamos sus expresiones sobre supuesta connivencia entre dirigentes del radicalismo y el gobierno de la provincia de Buenos Aires”, aclaran en el documento a modo de introducción.

Y prosiguen “los legisladores radicales han actuado siempre con responsabilidad republicana en su labor, no siendo nunca un impedimento para que quienes gobiernan por la voluntad popular puedan ejercer su gestión”.

“Ahora bien, esa actitud responsable no ha impedido que marquemos en cada caso nuestras profundas diferencias con la gestión del Gobernador Scioli. Hemos remarcado el estado caótico en que se encuentra la provincia que luego de 10 años de crecimiento económico nos pone a los bonaerenses en la necesidad de vivir bajo emergencia de seguridad, emergencia sanitaria, emergencia vial, emergencia hídrica y con un sistema escolar que apenas brindará este año 150 días de clases a los alumnos bonaerenses”, aclaran.

Tocados en su orgullo por una radical de paladar negro, tal como se define Carrió, los diputados radicales reafirman que “Somos la oposición a este gobierno y a los 27 años de gobiernos justicialistas, que han colocado a la provincia de Buenos Aires en una situación decadente a la que nunca se debió llegar”.

Y agregan “no se puede ser tan irresponsable de agraviar sin fundamento alguno a dirigentes radicales que han hecho de la honestidad y la militancia permanente una forma de hacer política que reivindicamos como la mejor”.