En una histórica elección, la alianza entre el PRO, la UCR y la Coalición Cívica logró quedarse con el control de 64 comunas, mucho más de la mitad que controla hasta el momento. El Frente para la Victoria, en tanto, prevaleció en 56 localidades, 33 menos de las que tiene en la actualidad. En efecto, la magra performance del kirchnerismo hizo que perdiera en 41 distritos y solo lograra ganar ocho en las que no gobernaba, al tiempo que mantuvo su predominio en 48.

En tanto, el massismo (Unidos por una Nueva Alternativa) logró revertir algunos resultados de las Primarias y finalmente se impuso en 10 ciudades, mientras que fuerzas vecinalistas obtuvieron cinco intendencias.

De los datos aportados por el escrutinio provisorio surge además que en 60 localidades habrá un cambio de signo político, 45 de las cuales pasaron a manos de Cambiemos. Este escenario de “cambio de aire” en el mapa bonaerense se verá materializado con la aparición de 77 nuevos jefes comunales, puesto que solo 58 de los 100 que iban por la reelección lograron coronarse para un nuevo mandato: 38 son del FpV, 13 de Cambiemos, cinco de UNA y tres son vecinalistas.

BATACAZO EN EL CONURBANO

En el Conurbano, el espacio que a nivel nacional lidera Mauricio Macri, mantuvo las alcaldías de San Isidro, de la mano de su aliado Gustavo Posse y de Vicente López, donde Jorge Macri logró renovar. En tanto, en el Gran Buenos Aires le arrebató ocho distritos al kirchnerismo, entre ellos bastiones históricos como Tres de Febrero y Pilar. En la primera comuna, luego de 24 años en el gobierno, Hugo Curto fue derrotado por el historiador y periodista Diego Valenzuela, quien le sacó una ventaja de 13 puntos. Y en Pilar Humberto Zúccaro cayó con el 35,77 por ciento frente a Nicolás Ducoté, que obtuvo un 46,58, y tras tres períodos al frente de la comuna afirmó que “dará un paso al costado” en la política.

Cabe señalar que mientras tanto el FpV sólo logró sumar dos nuevos distritos con sus triunfos en Hurlingham y Malvinas Argentinas, donde le quitó el control a los massistas Luis Acuña y Jesús Cariglino.

Cambiemos ganó además en el distrito sabbatellista de Morón, de la mano de Ramiro Tagliaferro, marido de la gobernadora electa, María Eugenia Vidal; también en Lanús, General Rodríguez y Quilmes. En este último, el cocinero Martiniano Molina se impuso por 12 puntos sobre otro barón del conurbano, Francisco “Barba” Gutiérrez. En La Plata, el embate macrista dejó sin posibilidades de ser reelegido para un tercer mandato a Pablo Bruera, quien también cayó por una amplia diferencia, más de 12 puntos. Y en Berisso, localidad aledaña a la capital provincial, el kirchnerismo corrió la misma suerte y el radical Jorge Nedela se impuso por un escaso margen. El mismo escenario se registró en General Rodríguez, donde el actual intendente Juan Pablo Anghileri fue derrotado por Darío Kubar.

ESCENARIO EN EL INTERIOR

No obstante, el fuerte de Cambiemos estuvo sobre todo en el interior provincial, donde ganó en las principales ciudades y le arrebató al kirchnerismo los distritos clave de General Pueyrredón (Mar del Plata) y Olavarría; y al Frente Renovador, Junín y Bahía Blanca.

En el caso de Olavarría, el resultado sorprendió, porque el actual jefe comunal José Eseverri, quien se había impuesto en las PASO, fue derrotado por el macrista Ezequiel Galli por 11 puntos de diferencia. En Mar del Plata, en tanto, el intendente Gustavo Pulti fue derrotado por el macrista Carlos Arroyo.

Asimismo, diversas alcaldías radicales lograron mantenerse con el nuevo sello, tales como Tandil –donde Lunghi ganó con el 56,9 por ciento de los votos-, Coronel Dorrego, Saladillo, Ayacucho, Salliqueló, Pergamino, San Cayetano, 9 de julio, General Alvear y Pellegrini, aunque muchas de esas comunas cambiaron de titular. También logró la reelección Oscar Luciani, aliado de Macri en Luján.

Mientras que en Dolores, Camilo Etchevarren, logró renovar la intendencia por tercera vez. Así, como también Rivadavia, que quedó en manos del PRO.
En tanto, el kirchnerismo perdió contra Cambiemos unas 25 intendencias del interior: además de Mar del Plata y Olavarría, fue derrotado en Chacabuco, Arrecifes, Baradero, Brandsen, Campana, Cañuelas, Coronel Suárez, Lobos, Balcarce, Bragado, Lezama, Las Flores, Lincoln, Lobería, Patagones, Pinamar, Puán, Rauch, Suipacha, Ameghino, Mar Chiquita y Tornquist.

Asimismo, el Frente para la Victoria (FpV) también perdió Necochea, a manos del Frente Renovador con Facundo López, en una reñida contienda con el candidato de Cambiemos y hombre de Gerónimo Venegas, Pablo Aued. Mientras que en Chivilcoy, Darío Speranza, hombre de Florencio Randazzo, perdió contra el massista Guillermo Britos, excomisario y actual diputado bonaerense. El kirchnerismo fue derrotado en Villarino, al sur provincial, a manos de un vecinalismo aliado al massismo. Y también cayó en manos del espacio de Sergio Massa en San Andrés de Giles y Monte.

En tanto, cabe señalar que el FpV ganó en Hipólito Yrigoyen, gobernada por el histórico Enrique Tkacik, que competía con el sello Cambiemos. Mientras que en Daireaux, el kirchnerista Alejandro Acerbo obtuvo un 52 por ciento de los votos y le ganó al radical de Cambiemos, Esteban Hernando. Lo mismo sucedió en 25 de Mayo, comuna gobernada por el radicalismo, donde el postulante kirchnerista, Hernán Ralinqueo superó al macrista, Martín Torre.

En Chascomús también hubo sorpresas: un vecinalismo local aliado al Frente Renovador, ganó la histórica comuna radical con el 36,5 por ciento de los votos.