En medio de la fuerte tensión por las inundaciones, el Gobierno provincial “aceleró y reorientó” el plan de acción por las inundaciones en el noroeste bonaerense, luego de que el municipio de General Villegas realizara esta semana un corte fuera de lo acordado en la ruta nacional 226, lo que generó una nueva polémica entre los intendentes de la región.

Según señaló el Gobierno provincial mediante un comunicado, ante esta situación las autoridades “trabajaron contrarreloj para encontrar una solución acordada a la emergencia y poner en marcha el plan de acción que evite consecuencias inesperadas para los municipios vecinos”.

Según dijo a DIB el ministro de Agroindustria provincial, Leonardo Sarquís, “el municipio de Villegas se anticipó a una acción que iba a realizar el Gobierno provincial” y por ese motivo las autoridades se vieron obligadas a modificar los planes.

Ahora, la subsecretaría de Infraestructura Hidráulica dispuso las ampliaciones de alcantarillas para facilitar el escurrimiento hacia el este en las rutas 188 y 33, en los kilómetros 355 y 441 respectivamente.

“Ese era el pedido de los ciudadanos de Villegas, pero necesitábamos tiempo para realizar las gestiones y coordinar con los municipios que puedan verse perjudicados por ese caudal de agua. También era necesario acordar con Vialidad nacional y provincial”, agregó Sarquís, quien estimó que los trabajos estarán terminados mañana.

Mediante un comunicado, el Gobierno bonaerense señaló que el corte en el kilómetro 620 de la ruta 226 para drenar el agua, que se realizó sin el consenso y la autorización de la Provincia, “obligó a modificar los planes originales para evitar la anegación de los cascos urbanos aguas abajo”.

“La idea era empezar por la 33 y mientras tanto hacer los trabajos agua abajo que ahora estamos haciendo acelerados”, le explicó a esta agencia el intendente de Rivadavia, Javier Reynoso.

En tanto, Sarquís intentó llevar tranquilidad a los vecinos de Rivadavia, Trenque Lauquen y Carlos Tejedor al asegurar que “esta acción se puede tomar porque no hay riesgo de inundar a ninguna localidad”. Y aseguró que “la prioridad del Gobierno es la protección de los cascos urbanos”.

“Esto sigue siendo prioritario para el Gobierno Provincial que ya había desplegado recursos para fortalecer el terraplén de la ciudad cabecera de General Villegas y otros pueblos del distrito ante la presión del agua”, agregaron desde el Gobierno mediante un comunicado.

“El impacto del escurrimiento del agua requiere de prevención y programas de mitigación aguas abajo, de modo de preservar los cascos urbanos ubicados al sureste de General Villegas. En ese contexto, la Provincia está trabajando en la Ruta Provincial 70 para consolidarla como barrera de contención de las ciudades de América (Rivadavia) y Colonia Seré (Carlos Tejedor). Además, están proyectadas obras de alteo en otros caminos rurales”, finalizaron.