El intendente de Puan, Facundo Castelli, declarará la emergencia política y realizará un fuerte ajuste en la planta política con el objetivo de ahorrar unos $5 millones de pesos mensuales, al tiempo que admitió que no renovará contratos de municipales y reducirá horas extras.

"La idea es extender la emergencia por seis meses, aunque no descartamos que debamos hacerlo hasta fin de año, hasta estabilizar las cuentas del municipio", advirtió Castelli en diálogo con el diario bahiense La Nueva.

En ese sentido, el jefe comunal señaló que se achicará la estructura política del departamento Ejecutivo."De las cuatro secretarías que hay ahora sólo van a quedar dos. También vamos a sacar direcciones y coordinaciones, y otras las bajaremos de rango. Esto producirá un ahorro del orden de los 1,3 millones de pesos", adelantó.

La emergencia económica también implicará achiques en el número de contratos y recortes en viáticos y horas extras, entre otros gastos. "Hay algunos contratos de trabajo que se vencen y no vamos a poder renovar", señaló.

Asimismo, en promedio, los salarios de la planta política se reducirán un 30%. Esto incluirá a los concejales y al propio intendente. "Al cambiar los rangos, los sueldos bajan automáticamente; es decir, un secretario que se convierta en director, pese a tener una función similar, percibirá un salario menor", explicó el intendente.

"En cuanto a los cargos y sueldos que no se pueden reducir, como el mío, o las dietas de los concejales, la idea es hacer el ahorro mediante la figura de donación. Esto implica crear un fondo al que irán estas donaciones, que será destinado a becas o asistencia social. Además, en mi caso se eliminarán los gastos de representación", indicó.

Castelli aclaró que no se modificarán los coeficientes "para no afectar a los jubilados municipales". El Ejecutivo impulsará que el proyecto de ordenanza que declara la emergencia económica y sanitaria sea tratado por el Concejo Deliberante el miércoles de esta semana.