Los gremios estatales bonaerenses rechazaron por "completamente insuficiente"  la primera propuesta formal de aumento del gobierno de Axel Kicillof: $1.500 en concepto  recupero de la pérdida salarial de 2019 y una suma idéntica imputable como aumento para los salarios de marzo que no superen los $ 60 mil.

Se trata de la primera propuesta de suba salarial que formula el gobierno y abarca al universo de trabajadores más golpeados por la pérdida salarial de los últimos años: los estatales regidos por el régimen de la ley 10-430 en general los de la administración central-, que no tuvieron cláusula gatillo que ate sus sueldos a la inflación, algo que sí rigió para los docentes.

Los gremios comunicaron su negativa en la misma mesa de negociaciones, que integraron la ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec, y su par de Economía. Pablo López. Por eso, se decidió hacer unja nueva reunión el lunes, cuando se buscará acercar posiciones. Por ahora el acuerdo parece lejano.

Los trabajadores estatales sufrieron un recorte salarial que, según admiten en el mismo gobierno, rondó el 30% el año pasado, por lo que venían planteando primero recuperar esa pérdida y luego enfocar una recomposición hacia adelante. También, pidieron nombramientos y mejoras en la carrera salarial.

La oferta de Kicillof fue objetada en varios puntos: por un lado, el monto retroactivo no alcanzaba a recomponer la pérdida de 2019. Además, los $1500 de marzo se percibirían en abril- eran el único aumento que los trabajadores recibirán  en el primer trimestre, y para colmo no era retroactivo a enero.

Los gremios no solo quieren una suba mayor, sino que también buscan que se avance en una reestructuración de la estructura del salario, con pases de sumas que hoy se perciben el "gris" o negro, al básico.