Un senador del oficialismo presentó un proyecto para aumentar la presión fiscal sobre los grandes contribuyentes de la Provincia. La medida sube el Inmobiliario para las propiedades de más alta valuación fiscal e Ingresos Brutos para facturaciones superiores a los 20 millones de pesos.

Con la emergencia sanitaria producto de la pandemia en la mira, la iniciativa impulsada por Francisco Durañona (Frente de Todos), persigue recaudar unos 2 mil millones de pesos por mes.

“Es un aumento transitorio, que regiría desde junio hasta fin de año”, explicó en relación a la suba que se proyecta en Ingresos Brutos. “Va a afectar a los grandes contribuyentes como es el caso de los bancos y empresas de cable”, sostuvo.

El legislador afirmó que el incremento impactará sobre unas 1.500 partidas de las 1,5 millones que significa el universo de contribuyentes de ese tributo. Con las variantes lógicas por tratarse de dos jurisdicciones distintas, la iniciativa sigue la misma lógica que la presentada a nivel nacional por Máximo Kirchner, que grava a quienes se sumaron al blanqueo de capital durante la gestión de Mauricio Macri.

Durañona, ex intendente de San Antonio de Areco, es una de las principales espadas del  kirchnerismo en la Cámara alta provincial. “Una situación extraordinaria requiere la adopción de medidas extraordinarias por parte del Estado en todos sus niveles. Esta iniciativa pretende aportar recursos para que nuestra Provincia transite de la mejor manera y con el financiamiento necesario para la implementación de políticas públicas equitativas en este contexto de emergencia”, señaló.

El legislador dijo que en el gobierno bonaerense están al tanto del proyecto y que como no encontró resistencias, avanzó con la presentación. Fuentes de la Agencia de Recaudación (ARBA) precisaron al diario El Día, que no participaron de su elaboración. “No tiene nuestro aval”, consignaron.

La iniciativa, como se dijo, promueve un incremento transitorio del 30% en el Impuesto sobre los Ingresos Brutos para aquellos contribuyentes con mayor capacidad de aportar. Y al mismo tiempo, una desgravación a los sectores con márgenes acotados para sostener la contribución. Establece que las modificaciones regirán “a partir del anticipo con vencimiento durante el mes de junio de 2020 y hasta el anticipo con vencimiento en el mes de enero de 2021”.

En cuanto al Impuesto Inmobiliario, Durañona impulsa la implementación de medidas “que tornen más progresiva la imposición patrimonial”, incrementando la contribución de ejercicio 2020 para los inmuebles con la mayor valuación fiscal en las plantas Urbana Edificada, Urbana Baldía y Rural.

Para este año se estableció un tope de aumento del 75 por ciento para el caso de las propiedades  de más alta valuación fiscal en el caso del Inmobiliario Urbano. Durañoña pretende llevarlo al 100 por ciento cuando la valuación supere los 3,1 millones de pesos.

El legislador explicó que la iniciativa busca “aliviar el impacto que el aislamiento social, preventivo y obligatorio -dispuesto de manera extraordinaria para combatir la pandemia- tiene sobre la economía. En este complejo escenario epidemiológico se ha vuelto aún más evidente que la distribución de los costos es desigual entre los distintos actores económicos, siendo más angustiante para los trabajadores informales, los cuentapropistas y quienes tienen menores ingresos.