Los hermanos Cristian y Martín Lanatta -luego de recibir un pedido de pena de 14 años de prisión- volvieron a acusar a Aníbal Fernández, en la última jornada del juicio oral, en el que son juzgados junto a Víctor Schillachi por la triple fuga del penal de General Alvear, ocurrida el 27 de diciembre de 2015 y que puso en vilo al país, a los pocos días de asumir Mauricio Macri la presidencia y María Eugenia Vidal la gobernación bonaerense.

Los acusados, luego de escuchar el severo pedido de condena por parte de la fiscal de Juicio Silvina Langone, que los acusó por los delitos de “robo, privación ilegal de la libertad y evasión”, señalaron que “era fugarse o no contar más el cuento”.

Al hacer uso de la palabra, en la última oportunidad que tienen los procesados de decir algo antes de que el Tribunal pase a deliberar, los hermanos Lanatta y Schillati ensayaron el siguiente descargo: “Nos obligaron a fugarnos desde el servicio penitenciario. El Estado nos puso en riesgo. La gente del servicio penitenciario hasta puso en nuestras manos facas (elementos punzantes de fabricación casera) para hacer daño”.

“Nuestras vidas corrían peligro”, dijeron luego de acusar a Aníbal Fernández, el ex jefe de Gabinete del gobierno de Cristina Kirchner y candidato a gobernador bonaerense.

Los ahora acusados lo apuntaron como posible “instigador del triple crimen de la efedrina, en General Rodríguez”, mediante un reportaje concedido al periodista Jorge Lanata, en el que aseguraron que el supuesto jefe de la organización narco, conocido como “La morsa”, era el ex jefe de Gabinete nacional.

La fiscal, al formular la acusación contra los tres imputados, para graduar la pena requerida, tomó en cuenta como agravantes “la nocturnidad, la pluralidad de víctimas y la extensión del año causado”. En tanto, el abogado defensor Pedro Martini, solicitó la absoluciòn de sus defendidos.

“Mis asistidos provocaron una fuga que mantuvo en vilo a la sociedad durante 15 días”, y reiteró las acusaciones contra Fernández al considerar “cuántas veces una persona privada de la libertad acusó directamente a un jefe de Gabinete de determinadas cuestiones. Cuantas veces eso trascendió a nivel nacional”.

“Mis clientes no están muertos porque tomaron la primera oferta que se les hizo para fugarse”, alegó. También resaltó que “les ofrecieron hasta un helicóptero y dinero”.

El defensor dijo que “esto no es un caso común. Mis tres clientes purgaban una pena por el triple crimen ocurrido en el 2008, confirmada en el 2012 y la denuncia contra el funcionario nacional que tenía un poder ilimitado y que aún hoy lo tiene, hace que eso no sea un caso más. Ellos estaban en la necesidad de evadirse. Sus vidas corrían peligro. Esto conforma que hubo un estado necesidad””, figura prevista en el Código Penal para eximir de culpa.

“No podemos escindir este hecho con los dichos de mis clientes en el programa de Lanata, en el que acusaron a Aníbal Fernández de ser `La morsa’ y presunto “responsable del triple crimen de General Rodríguez”, argumentó el defensor.

Martín Lanata, antes del juicio habìa afirmado que “la triple fuga fue armada para voltear” el gobierno de la gobernadora Vidal”.

“QUERÍAN DEJARLE TRES MUERTOS AL GOBIERNO DE VIDAL”

Además afirmó que “nos abrieron la puerta (del penal bonaerense de General Alvear) para matarnos. Y querían dejarle tres muertos al gobierno”.

“La triple fuga -agregó, en un reportaje a un sitio de internet- fue armada para voltear a Vidal y además para eliminarnos y no podamos acusar a Aníbal Fernández”. “Todos sabíamos que la gobernadora la iba a tener difícil. Era obvio”, aseguró y agregó que “detrás de las amenazas ( a Vidal) está la mafia penitenciaria y policial”.