Intendentes peronistas del interior bonaerenses le pidieron hoy al gobierno de María Eugenia Vidal ampliar un Fondo para el Fortalecimiento de Programas Sociales de $ 1.200 millones para hacer frente lo más agudo de la crisis, que en su distrito se distingue por el impacto en alquileres y tarifas.

El planteo se materializó en una reunión que mantuvo un grupo de alcaldes con el ministro del Desarrollo Social de Vidal, Santiago López Medrano. El funcionario, encargado de la contención social en el terreno, una política clave para la Gobernadora, había recibido la semana pasada a los intendentes del Conurbano.

Según pudo saber DIB, los intendentes pidieron aumentar las partidas del Fondo o crear uno nuevo, para potenciar el gasto social, aunque algunos de ellos, como ocurrió con el Fondo Educativo, hayan usado en el pasado  algunas de esas partidas para financiar gastos corrientes, un destino que en teoría tenían vedado.

Lopez Medrano solo se comprometió a estudiar mecanismos que agilicen la distribución del dinero del Fondo. El funcionario comprobó de boca de los alcaldes, una particularidad que viene observando hace meses: en el interior, el alto precio relativo de los alquileres –y las subas tarifarias- tienen un efecto específico en la crisis.

Los intendentes sostienen que perciben ese efecto en el aumento de la demanda en las ventanillas sociales de las comunas, a las que llegan más pedidos de personas que tienen que disponer de una porción mayor de sus ingresos para solventar esos gastos. También los preocupa

La cuestión alimentaria está presente en esos distritos, donde también se registra un aumento de los pedidos. Pero a diferencia de lo que ocurre en el Conurbano, la especificidad de la coyuntura aquí parecen ser los alquileres y los servicios. También existe una mirada oficial sobre el fenómeno de cierta clase media del interior refractaria a pedir ayuda social, aunque la necesite,