

La ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Teresa García, volvió a cuestionar a los intendentes que teniendo casos en sus distritos insisten con relajar el aislamiento por coronavirus y consideró que “abrir indiscriminadamente la actividad no tiene sensatez” en momentos en que la cantidad de contagios se encuentra en aumento.
García cuestionó este viernes a los intendentes cuyos distritos “no están libres de Covid-19 y piden más habilitaciones” de actividades y servicios. En ese marco, apuntó otra vez al intendente de San Isidro, Gustavo Posse, por querer “abrir uno de los shoppings más grandes de la ciudad” y al jefe comunal de Olavarría, Ezequiel Galli, “que hasta hizo una encuesta para ver si la gente quería abrir todo y ese mismo día tuvo 4 casos; al día siguiente, 8; y hoy estamos en 79, por lo que tuvo que volver a la Fase 1”.
“Otro caso fue Capitán Sarmiento, donde se habían abierto todas las actividades y hubo 30 contagios. Cuando el virus circula, hay que volver a la fase anterior de manera automática”, explicó García a El Destape Radio. En este marco, recordó que, al comienzo de la pandemia, “Capital Federal cerró vías de acceso e intendentes del interior hicieron vallas para evitar que la gente de afuera ingrese”.
“Parece mentira que ahora, cuando el virus está en plena expansión y multiplicación, estas mismas personas quieran abrir indiscriminadamente las actividades”, indicó la funcionaria bonaerense, quien consideró que ese planteo “no tiene sensatez”.
“Estamos en un momento muy grave y el gobernador Kicillof va a seguir reclamando lo que viene pidiendo hace un mes: más control de tránsito en vehículos particulares y transporte público, y restringir la circulación ente provincia y CABA”, destacó.
Por último, la ministra de Gobierno dijo que los dos meses de cuarentena estricta “que algunos critican sirvieron para reforzar el sistema de camas” tanto del sector público como privado.