Este jueves por la tarde, una vecina que se dirigía a la sede del Banco Provincia, en el barrio de Villa Talleres de Junín, dio aviso a las autoridades policiales sobre el hallazgo de tres falanges y manchas de sangre. Rápidamente la zona la calle Padre Ghío, entre Pringles y Paso, se cercó y comenzó a trabajar la división científica para comprobar si pertenecían a Rosa Inés Fernández, de 29 años, desaparecida desde fines del mes pasado y por la que se está desarrollando una intensa búsqueda. 

De todos modos, se comprobó que las falanges correspondían a un joven que tuvo un accidente con la cadena de su moto, que había sido atendido en la guardia del hospital.  

En contacto con los medios presentes en ese lugar, el fiscal Estéban Pedernera, a cargo de la investigación, explicó que quedó descartado el indicio de coincidencia entre esos dedos y los datos genéticos de Rosa Fernández. "Los rastrillajes se siguen haciendo, seguimos instando a la comunidad que aporte los datos que pueda para dar con el paradero de Rosa Fernández. Toda la jurisdicción de la comisaría segunda está completamente rastrillada, todo dato de todos modos se va siguiendo, sea por tierra o por agua", detalló. 

Al tiempo que señaló: "se manejan las hipótesis que fueron aparenciendo, no son muchas, pero no se descarta nada. No se descarta rastrillar partidos cercanos a Junín, pero no han surgido datos que nos lleven en ese sentido. Tratamos por el momento de acotarnos a los lugares donde tenemos indicios".