El intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos, analizó el resultado electoral, adelantó cambios en su gabinete y dejó un mensaje a la dirigencia política local. “Lo primero que quiero aclarar es que no pedí ninguna renuncia. El intendente no necesita hacerlo porque los funcionarios son designados y removidos por decreto. Agradezco el gesto de todo el Gabinete después del revés electoral”, expresó.

En esa línea, confirmó que habrá modificaciones en su equipo de gobierno: “No serán muchas, pero sí puntuales en áreas específicas. Algunas secretarías dejarán de serlo y otras pasarán a serlo, según las necesidades de los vecinos. Dabi será parte del Ejecutivo en un lugar clave, y veremos qué decide Aronna”.

Respecto del Concejo Deliberante, remarcó que su espacio tendrá seis concejales propios tras el recambio de diciembre, igual número al actual. Además, destacó que la presidencia del Consejo Escolar le corresponde a su sector: “Nosotros sacamos 18.000 votos en 2023 y ellos 13.000 ahora, por lo tanto será nuestra”.

Sobre el panorama político, Britos fue autocrítico: “Dejar Primero Chivilcoy fue un error mío. Si competíamos con esa boleta, seguramente se hubiera generado otra lista radical o randazzista y cambiado algunos resultados”.

En relación al futuro, sostuvo: “Los votos de Fuerza Chivilcoyana, más los de LLA y los nuestros, son el voto anti K. Con 13.500 votos no alcanza para ser intendente. Asumo la derrota y voy a trabajar incansablemente para revertir el resultado de cara al 2027”.

Finalmente, dejó un mensaje hacia adentro de la política local: “Es importante que nadie se sienta intendente antes de tiempo. También pedimos al gobierno nacional y provincial que entiendan el mensaje de las urnas: necesitamos obras, gestión y diálogo”.