El intendente de Castelli, Francisco Echarren, formalizará en las próximas horas su apoyo a la candidatura a senadora de Cristina Fernández (Unidad Ciudadana), y se convertirá en el cuarto jefe comunal en abandonar las filas del Frente Justicialista que lidera Florencio Randazzo.

El “pase” de Echarren, quien hasta junio pasado integró el gabinete de María Eugenia Vidal, se oficializará con un gesto: su participación en un homenaje al exgobernador Antonio Cafiero, al cumplirse mañana el 30 aniversario de su victoria en Buenos Aires.

El acto es organizado por el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, uno de los más firmes impulsores de la candidatura de CFK. La presencia de Echarren, si bien no está previsto que realice declaraciones, será el gesto concreto del nuevo giro del jefe comunal.

La salida de Echarren es la cuarta que sufre Randazzo por parte de sus intendentes después de las PASO. Ya lo habían hecho, sin demasiado ruido, Ricardo Casi (Colón) y Ricardo Alessandro (Salto), y con mucho mayor eco Juan Zabaleta (Hurlingham). En el acto de mañana, de corte bien peronista, también podría aparecer Gabriel Katopodis (San Martín), el último intendente “fuerte” que aún juega con Randazzo.

Como informó DIB días atrás, los intendentes que formaban parte del núcleo duro de Randazzo le pidieron, una semana después de las PASO, que baje su candidatura para favorecer la de Cristina Fernández. Ante la negativa del chivilcoyano, cuatro de los 10 jefes comunales que le respondían optaron por abandonar el espacio y convocaron a votar a CFK, pese a que sus candidatos locales juegan con el sello del PJ.

Desde el entorno de Echarren, en tanto, aseguraron que la movida del intendente se da “por pedido de las bases”. Un argumento parecido expuso Zabaleta, cuando anunció a través de Twitter el abandono del Frente Justicialista.